PATRIMONIO
Ha pasado casi un mes desde que abrimos nustras casas Masónicas al público, con un resultado que nos deja muy contentos.
Más de mil personas acudieron a las casas masónicas de Santiago, Valparaíso, Rancagua y Chillán, se celebró el Día de los Patrimonios 2023. El balance fue positivo pues permitió el encuentro de interesados asistentes con la Gran Logia Mixta de Chile, a través de la labor de los anfitriones, miembros de la Orden.
El informe oficial indica que, se realizaron más de 2.600 actividades, con motivo del Día de los Patrimonios. En Santiago, la Gran Logia Mixta de Chile, recibió a los visitantes con continuos recorridos por la Casa Masónica y pequeñas charlas explicativas. Además, el Día domingo 28 de mayo, se realizó una Tenida Blanca con la participación de aproximadamente 145 personas.
En Valparaíso, se efectuaron, con gran afluencia de personas, visitas guiadas a la Casa Masónica, recorriendo el Museo, el Templo y la Biblioteca. También se llevó a cabo una Tenida Blanca con la asistencia de un centenar de personas.
La ciudad de Chillán, por primera vez, abrió la Casa Masónica, mostrando la identidad de la orden, a través de una presentación inicial, para luego responder las numerosas consultas de los asistentes, más de 60 personas. La primera visita la realizó la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de Ñuble, Scarlet Hidalgo Jara.
En Rancagua, el Centro Cultural “Umbrales” perteneciente a la R∴ L∴ Fénix N°59, preparó cápsulas culturales compuestas por: danza árabe, musicalización de textos del poeta Óscar Castro, a cargo de Ingrid Arriola y Guillermo Barrios y la música del compositor Héctor Escobar, en compañía del concertista en guitarra David Cáceres.
Algunas actividades, en Rancagua, contaron con la colaboración de jóvenes del Liceo Óscar Castro, en particular, la muestra de fotografías antiguas de la ciudad y del poeta Óscar Castro.
FIESTAS PATRIAS
El 18 de septiembre en Chile se celebra el Día de la Independencia, conocido también como las Fiestas Patrias. Esta fecha conmemora el proceso de independencia de Chile de la corona española, que culminó el 18 de septiembre de 1810 con la formación de una Junta de Gobierno en la ciudad de Santiago.
Las celebraciones del 18 de septiembre son las más importantes y tradicionales del país. Durante este día, los chilenos se reúnen en familia y amigos para festejar con alegría y entusiasmo. Las calles se engalanan con banderas chilenas, guirnaldas y adornos patrióticos, y los hogares se decoran con ramas de árboles y colores alusivos a la bandera nacional.
La festividad está marcada por diversas tradiciones y actividades. Una de las principales es la realización de las "ramadas" o "fondas", que son espacios públicos o privados donde se instalan casetas o carpas para ofrecer comida típica, bailes folklóricos, música en vivo y juegos tradicionales. Durante estas ramadas, se pueden disfrutar de platos típicos como el asado, la empanada, el anticucho y el buen vino chileno.
Otra costumbre destacada es la "cueca", el baile nacional de Chile. Parejas vestidas con trajes tradicionales ejecutan los pasos de esta danza folklórica al ritmo de guitarras, acordeones y panderos. La cueca simboliza el coqueteo y la seducción entre un hombre y una mujer, y es un elemento central en las celebraciones del 18 de septiembre.
Además, durante estas festividades, se realizan desfiles militares y cívicos en diversas ciudades del país, donde se exhiben las fuerzas armadas, escuelas, organizaciones sociales y otras instituciones. Estos desfiles son una muestra de unidad y orgullo nacional, y brindan la oportunidad de reconocer y agradecer a aquellos que han contribuido al desarrollo y progreso de Chile.
En resumen, el 18 de septiembre en Chile se celebra el Día de la Independencia, una fecha de gran importancia histórica y un motivo de fiesta y alegría para todos los chilenos. Es un momento para honrar la identidad y cultura chilena, disfrutar de la comida típica, bailar la cueca y compartir con seres queridos en un ambiente festivo y patriótico.
La inteligencia artificial (IA) es un campo de estudio que busca desarrollar sistemas y programas capaces de realizar tareas que requieren de inteligencia humana, como el reconocimiento de voz, la toma de decisiones y el aprendizaje automático. A lo largo de los años, la IA ha experimentado avances significativos, impulsados por el crecimiento exponencial del poder de cómputo, la disponibilidad de grandes volúmenes de datos y los avances en algoritmos y técnicas de aprendizaje automático.
Uno de los avances más destacados en la IA es el desarrollo de redes neuronales profundas, también conocidas como redes neuronales convolucionales o recurrentes, que han permitido importantes avances en áreas como el reconocimiento de imágenes, el procesamiento del lenguaje natural y la conducción autónoma de vehículos. Estos avances han llevado a la aplicación de la IA en una amplia gama de industrias, como la medicina, la logística, la manufactura y el comercio.
Sin embargo, junto con los avances tecnológicos de la IA también surgen desafíos y desventajas. Algunas de las principales preocupaciones son:
Desplazamiento laboral: A medida que la IA se vuelve más capaz de automatizar tareas, existe el riesgo de que ciertos trabajos sean reemplazados por máquinas, lo que puede causar desempleo y desigualdad económica.
Sesgos y discriminación: Los sistemas de IA se entrenan utilizando conjuntos de datos que pueden contener sesgos inherentes, lo que puede resultar en decisiones discriminatorias. Por ejemplo, los sistemas de reconocimiento facial han mostrado tendencias a cometer errores en la identificación de personas de ciertos grupos étnicos.
Privacidad y seguridad: La IA puede recopilar y analizar grandes cantidades de datos personales, lo que plantea preocupaciones sobre la privacidad y el uso indebido de la información. Además, los sistemas de IA también pueden ser vulnerables a ataques y manipulaciones maliciosas.
Falta de comprensión y explicación: A medida que los algoritmos de IA se vuelven más complejos, a menudo se hace difícil comprender cómo toman decisiones. Esto puede plantear desafíos éticos y legales, especialmente en aplicaciones críticas como la atención médica y el sistema judicial.
Es importante abordar estos desafíos y desarrollar marcos éticos y regulatorios sólidos para guiar el desarrollo y la implementación de la IA. A pesar de sus desventajas, la IA tiene un gran potencial para mejorar la sociedad y proporcionar soluciones innovadoras a problemas complejos. Con un enfoque cuidadoso y responsable, la inteligencia artificial puede ser una herramienta poderosa y beneficiosa para la humanidad.
La educación en escuelas y liceos, en tanto espacios de formación de los ciudadanos del futuro, están convocados a desarrollar y ejercitar con los estudiantes nuevos conocimientos, habilidades y actitudes para vivir exitosamente en este siglo.
La serie de cambios acelerados que actualmente nos afectan en los ámbitos social, político, tecnológico y económico son el resultado del desarrollo histórico de procesos que vienen transformando la sociedad desde siglos anteriores. El sistema educativo juega hoy un rol crucial en los nuevos retos sistémicos a los que nos enfrentamos como comunidad, un desafío colectivo en el que participan gobiernos, ciudadanía, instituciones públicas y privadas y todos los actores de la educación.
En los últimos tres siglos, la humanidad ha visto transformaciones radicales en los medios de producción, pasando desde una economía centrada en la agricultura —que acompañó a la humanidad desde los primeros asentamientos conocidos— a una era industrial caracterizada por la automatización de los procesos productivos y la revolución científica, para dar paso a una sociedad basada en la información, el conocimiento y la innovación, con la mediación del control computacional y la digitalización.
El rápido crecimiento de las economías, el concepto de un progreso ilimitado que se instaló con fuerza en el siglo XVIII y la mejora significativa de las expectativas de vida, entre otras fuerzas, generan un desarrollo sin precedentes en la historia de la humanidad, pero al mismo tiempo una serie de conflictos y contradicciones que más tarde identificaremos con la urgencia de lograr un desarrollo sostenible.
Algunas de estas discordancias son la expansión industrial en desmedro del medioambiente, el crecimiento económico desigual (en especial en Latinoamérica) y la inequidad laboral y previsional que afecta a la mujer. De acuerdo a la OCDE [1] y la ONU [2], algunos de los principales desafíos que enfrentamos son:
Cambio climático y calentamiento global.
Problemas de salud mundial (por ejemplo, epidemias).
Crecimiento de la población.
Migraciones.
Impactos en el desarrollo de la economía global.
Contaminación del aire.
Conflictos internacionales.
Hambre y malnutrición en distintas partes del mundo.
Causas de la pobreza.
El acelerado tiempo de cambio tecnológico en el mundo.
El impacto del envejecimiento de la población.
Igualdad entre hombres y mujeres.
Consecuencias de la tala indiscriminada para otros usos del suelo.
UNA NUEVA EDUCACIÓN PARA UNA NUEVA SOCIEDAD
Como espacio de formación de los ciudadanos del futuro, la educación tiene el gran desafío de ponerse a la vanguardia del proceso de transformación. Un cuadro que refleja este reto es el que presenta Charles Fadel en su libro “La Educación en Cuatro Dimensiones”, que muestra desfase entre la formación académica y el desarrollo tecnológico y sus consecuencias.
Los grandes desafíos, contradicciones del siglo XXI y la imposibilidad de predecir un mundo en permanente transformación, así como la omnipresencia de la información a través de Internet, nos plantea la necesidad de un cambio de paradigma educativo que nos permita avanzar desde una enseñanza centrada en los contenidos, la memorización y la respuesta correcta a un aprendizaje centrado en los saberes, habilidades y actitudes necesarios para vivir y trabajar en tiempos de permanente transformación.
Esto requiere el despliegue de una estrategia sistémica que responda a los desafíos que comenzamos a identificar, como por ejemplo, formar a estudiantes que enfrentarán trabajos, oficios que aún no conocemos, porque no se han creado, pero, ya podemos predecir un cambio en el mercado laboral, dado que cada vez más tareas se automatizan, se digitalizan lo que sin duda será un impacto social y exigirá al campo educativo soluciones pertinentes.
Hoy, el gran consenso apunta al desarrollo de las llamadas competencias para el siglo XXI, que son transversales al currículum escolar y flexibles al cambio, ya que están asociadas al desarrollo de capacidades plenamente humanas (la mayoría del tiempo en sus estadios superiores). Los modelos conocidos de competencias hacen un énfasis especial en las llamadas “cuatro C”, que comprenden las habilidades de la creatividad, el pensamiento crítico, la colaboración y la comunicación, a lo que sumamos metacognición y las funciones ejecutivas que nos permiten “aprender a aprender”, reflexionar y adquirir conciencia sobre los procesos personal y colectivo de aprendizaje.
Junto con abordar las grandes temáticas que enfrentarán nuestros estudiantes, tales como el cambio climático, los fenómenos migratorios, los conflictos internacionales y los problemas de salud, los sistemas escolares del mundo se están haciendo cargo gradualmente de nuevas asignaturas, disciplinas y conocimientos, tales como alfabetización en TIC, educación financiera, pensamiento computacional, formación ciudadana e interculturalidad y aprendizaje en servicio, así como implementando estrategias pedagógicas activas y transversales, tales como las metodologías de proyectos, resolución de problemas e indagación.
https://www.educarchile.cl/los-desafios-de-la-educacion-en-el-siglo-xxi
Por Fernanda Paúl
BBC News Mundo
Entrevistar a Gastón Soublette no es una tarea fácil.
A sus 94 años, el filósofo, esteta, musicólogo y escritor chileno ha perdido el sentido del oído, por lo que prefiere no atender el teléfono.
Tampoco tiene computador ni correo electrónico. Y todo lo que escribe, lo hace con una máquina de los años 80, incluidas las respuestas a esta entrevista.
Además, vive alejado del mundo, en una quinta en la pequeña localidad de Limache, en la región de Valparaíso, Chile.
Pero Soublette no pierde la lucidez. Tampoco su increíble capacidad de analizar la sociedad actual, con una agudeza que lo ha llevado a ser reconocido como un importante referente intelectual del país sudamericano.
En esta entrevista realizada hace unas semanas con BBC Mundo, Soublette desmenuza las consecuencias del crecimiento ilimitado en el mundo, las injusticias perpetradas por las élites políticas y económicas, la falta de solidaridad y respeto por la humanidad, y las consecuencias del avance de la tecnología en la mente humana, entre otras cosas.
Además, lanza una advertencia: cuando se acabe la pandemia, afirma, la “reacción violenta de las masas ante los privilegios de los poderosos continuarán”.
En Chile ha habido un fuerte debate respecto al individualismo y la falta de solidaridad en la pandemia, se dice que a nadie le importa mucho lo que le pasa al de al lado. ¿Cree que el coronavirus ha desnudado las fracturas de la sociedad moderna de este país?
Creo que la pandemia, al igual que una guerra, tiene el poder de extraer lo mejor y lo peor de los individuos y, esto, a modo de juicio final.
Lo peor está demasiado a la vista y no se puede disimular.
La espiral de la violencia delictiva, los femicidios que se multiplican, los asesinatos de niños y niñas, y hasta las amenazas de muerte de algunos a sus vecinos solo por el hecho de haber contraído el mal del coronavirus; las fiestas clandestinas de quienes no les importa contagiarse sin pensar que ellos pueden contaminar a otros; el pillaje a todo nivel de vehículos de transporte, de centros comerciales; los asaltos hasta en las calles céntricas de la ciudad; los atentados incendiarios; los enfrentamientos entre bandas rivales de narcotraficantes con balaceras que dan muerte a muchas víctimas inocentes, en fin…